LA VENTANA DEL PERDÓN

Si la soga luce al cuello
al no tener salvación
de algún mal es el destello
que no admite ni el perdón.
 

Al hacer lo que no debe
está sujeto a castigo
volviéndose un enemigo
cuando al dolo más se atreve.
Se empieza con daño breve
que fue solo por aquello
y cual si fuera un resuello
arremete a la costumbre,
hasta se queda sin lumbre
si la soga tiene al cuello.
II
Nadie delinque por gusto
se inicia por un motivo
y es a veces instintivo
pero siempre es algo injusto.
Más hay quien se porta adusto
de su indigna sedición
que merece la prisión
por enlodar el sistema,
es que grande es el problema
al no tener salvación.
III
Si es que en uso de razón
el delito se comete
al reglamento acomete
con feraz acusación.
No habiendo la solución
dejando mientras lo bello
a lo oscuro pone sello
cayéndose del sitial,
siendo todo un inmoral
de algún mal es el destello.
IV
Si es total la gravedad
pero no se regenera
por su injuria más le espera
el perder su libertad.
Visible al ser su crueldad
al incumplir la misión
le llega su destrucción
pues todo el mundo lo enjuicia,
es tan grande su injusticia
que no admite ni el perdón.
V
Cuando el ataque es artero
forja una huella imborrable
y la venganza imparable
ensombrece el derrotero.
Hasta el cauto es el primero
que de pronto ya no es fuerte
con el sentido de inerte
pierde todos sus valores,
es que en la vida si hay errores
no lo borra ni la muerte.
 
 

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