Las expresiones espirituales cuando se orientan hacia el arte integral encuentran en las entrañas humanas la fuente precisa para nacer en todo su esplendor.
Tan sólo vasta unos instantes de motivación afectiva para que toda esa vertiente de energía positiva aflore pleno de grandiosidades con proyecciones infinitas, cual un torrente de bondades imperecederas que justifican con creces la residencia pasajera en la tierra. Cada persona es un todo cósmico pero con distintas habilidades por la que se convierte la especie humana en seres expectante de realizaciones debido a sus disímiles virtudes que encierran su milagrosa y divina creación. Inclusive, se da el caso que existen jóvenes con innatas cualidades de líderes sin fronteras y aptitudes artísticas de muy buena ley que con una disciplina adecuada a sus propósitos pueden lograr el umbral de la excelencia en un tiempo no muy lejano. Tienen un carisma natural que les nace del alma e irradian si cesar un halo de superación personal que contagian tan solo con una conversación amena. Esa aureola de triunfo los acompaña a cada instante y dejan escrito por medio de una sonrisa y con letras de oro e indelebles que el talento no es propiedad de las grandes urbes ni de las potencias mundiales. En el rincón mas alejado de esta patria de mi infancia, existe la intelectualidad en flor, porque así no me crean DIOS es peruano y vive con nosotros por obra de la santa providencia.
En aquellas jóvenes vidas, por designios de la naturaleza; solo es necesario la mano de la experiencia para que guíen ese importante caudal de sabiduría y logren las más altas cumbres de la superación personal para beneplácito de los añoran el progreso y para cólera de los que esté acostumbrados a vivir bajo la sombra del poderoso en medio del servilismo y una sumisión indignante, por una migaja de pan; debido a que su crónica incompetencia los tiene muertos en vida por ser tan solo consumistas de vocación y convicción.
Mi apreciación por intermedio del ojo visor de la experiencia, nace al estar en contacto con estudiantes de diferentes latitudes y es que dejan entrever una gran verdad. Buscan un horizonte en la oscuridad de la noche y avanzan a pasos agigantados enarbolando la antorcha inapagable de la verdad, la justicia y un desarrollo sostenido con identidad propia. En sus vibrantes entrañas no hay un mínimo espacio para las banalidades de nublan el universo que hoy nos acoge; solo vibra sin cesar en lo más profundo de su mundo interior un irrenunciable deseo de trascender en el tiempo y el espacio conscientes de su rol que hoy representan para la sociedad. Y así digan que no los que de todo critican pero poco o nada hacen por solucionar los problemas cotidianos sino está de por medio el dinero; esto es lo que viene sucediendo en una gran mayoría de los alumnos de la Universidad José Carlos Mariátegui de Moquegua e Ilo a quienes les agradezco de todo corazón porque sus eufóricas ansias de un mañana mejor, han hecho renacer en mi la alegría de seguir viviendo encima de la cresta de las olas, así las balas enemigas apunten con ira a mi golpeado corazón que por ser rojo y blanco dice en cada palpitar ¡COMO TE QUIERO PERÚ!.