LA CUÑADA DE PEDRO

Se encontraba en su consultorio la Dra. Josefina Ramos Quispe con las enfermeras Regina Valverde Flor, Rita Delgado Soto. Cuando tocan inesperadamente a la puerta e ingresa un señor que se agarra el pecho por un fuerte dolor y la respiración se le hace difícil. De inmediato la doctora toma acción y  ordena que lo acuesten en la camilla.

Paciente Doctora ayúdeme  por favor, no puedo respirar estoy que me ahogo, me muero… (La Doctora ordena de inmediato)

Josefina. Regina, Rita Por favor ayúdenlo Desbotónele la camisa y Aflójele la correa (a lo que el paciente dice)

Pedro con cuidado señorita es que por venir rápido me he venido sin trusa y no le vaya a producir una mala impresión.

Regina. No se preocupe señor que estoy acostumbrada a mirar miniaturas.

Rita. De mi ni se preocupe que yo  soy encantadora de serpientes para que lo sepas.

Josefina.  (Un tanto molesta) Por favor mas seriedad señoritas. Srta. Enfermera, coloque al paciente boca abajo y hágale masajes. (El paciente que se llamaba Pedro Cossío Bravo a pesar de estar mal un tanto airado).

Pedro, Dra. Pero si el corazón yo lo tengo adelante ¿Por qué me voy a echar boca abajo?… (a lo que interrumpe la doctora)

Josefina, Oiga, yo soy el médico y usted es el paciente así que aquí mando yo y a usted solamente le queda obedecer.( el paciente a regañadientes acepta el tratamiento un poco raro. Ya boca a bajo las enfermeras empiezan a darle masajes en la espalda. Mientras tanto el médico le empieza a tomar unos datos

Josefina. ¿Es usted casado?

Pedro  si Doctora

Josefina ¿cuantos hijos tiene Señor?

Pedro (se pone a pensar) y contesta… 15 hijos Doctora nada más (La doctora mueve la cabeza asombrada e incrédula)

Josefina ¿quince?

Josefina ¿y con la misma?

Pedro Claro pues Doctora, yo cuando estoy sano  funciono bien, si quiere lo demuestro.

Josefina (riéndose) no, amigo,   me refería si ha sido con la misma mujer o tiene otro compromiso.

Pedro (enfatizando) con la misma y sin ayuda porque mi mujer es muy fiel. (Mientras tanto pedro se mostraba inquieto y miraba de pies a cabeza a las enfermeras)

Regina Cálmese Señor Cossío, que esto ya le va a pasar. Tenga paciencia,

Rita, Respire profundo y piense que se va a sanar bien pronto señor.

Pedro es que me siento peor

Regina pero que siente Señor?

Rita ¿mejor no hable mucho que se excita?

Pedro es con ustedes a  mi lado  siento que me descontrolo parece que estuviera al lado de dos angelito recién bajados del cielo

Las dos Enfermeras en Coro Hay Gracias Señor, no faltaba más…

Josefina (al paciente) por favor señor, más respeto que son unas señoritas sino me veré ligado a llamar al vigilante y ustedes chicas más cordura por favor.

Pedro No es necesario, solamente alababa su belleza señorita y si no le gusta entonces me callo (Continuaba el interrogatorio cuando tocan a la puerta y entra una mujer   y un señor, ambos fuera de si mismo y preocupados. Se trataba de María Salas Ordoñez  y de Julio Cossio Bravo

Doctora, Doctora ¿Qué es lo que tiene Pedro, se va a recuperar?

Julio: Doctora  por favor, díganos la verdad, ¿es peligroso?

Josefina si señora, señor, no se preocupen, solamente a simple vista parece una taquicardia, pero ya le esta pasando.

Maria, Doctora pero ¿porque le ha ocurrido eso?

Julio, si estaba completamente sano

Josefina, de repente está estresado, mucha preocupación o está cometiendo algún exceso.

María ¿Qué raro porque él  en la casa nada de nada,

Josefina como que nada de nada, si  tiene 15 hijos

María es que usted no sabe que al el le dicen FEDATARIO porque solo firma pero nada es de él.

Julio, Así  y eso que te conozco muy bien, así que tenías tus cosas bien ocultas…

Pedro no le haga caso Doctora, que esa mujer habla por despecho, más bien ella es la malograda. Como será de jugadora que en el barrio le dicen la primavera

Josefina La verdad que tengo curiosidad y saber por qué le dicen la primavera a la señora. Si parece bien seria

Pedro Seria es cuando duerme y si le dicen la primavera es porque cuando ella pasa se paran todos los pájaros.

Julio, no me consta pero varios me han  dicho lo mismo…

María. (Riéndose). Doctora si usted viera sus hijos, se queda en una sola pieza. No se le parecen a él y  entre ellos mismos son diferentes, por eso que a su casa le dicen las Naciones Unidas. (Regina interrumpe)

Regina, Doctora el paciente tiene sed

Josefina, dile que no moleste, perdón quise decir que le des agua hervida.

Josefina. Volviendo al tema, Ustedes me están haciendo hablar y ¿por qué le dicen las Naciones Unidas?

María, porque hay de todas las razas, hay rubios, blancos, cholos, negros, chinos, japoneses, hay de todo.

Julio, si es verdad, su casa parece comedor popular…

Pedro, me imagino doctora que usted no le va a creer a ella, lo que pasa es que ella ya pasó de moda y como yo no le hago caso me inventa cosas que ya no sabe que hacer para que le de importancia.

Maria. Hazme el favor, no hables tonterías, tu si que ya estas pa’l gato pero yo todavía tengo cuerda para rato (hace unos pasos como si estuviera modelando) claro debo admitir que a veces tengo mala suerte, Imagínate que el otro día un señor bien apuesto me dijo: mamacita, si te casas conmigo te voy a tener como una santa

Josefina  y ¿cumplió su promesa?

 María, si,  el muy bandido todos los días me tenía en ayunas y a pan y agua. En cambio  este no tiene mala suerte si no que le engañan porque  no ve la cara que tiene.

Josefina y qué es lo que han  hecho?

María El otro día se le aventó una chiquilla y le dijo: sabes Pedro, tengo urgencia de plata, préstame mil soles hasta la otra semana y si no te puedo pagar, pídeme lo que quieras y yo te lo doy y el muy bruto al toque le dio el dinero y  como no le pagaba sabe que le pidió?

Josefina ¿que le pidió?

María que le preste de vez en cuando sus pestañas postizas los fines de semana

Josefina no puede ser, bueno en fin allá ustedes.

Julio pero no se te nota mucho, además cuando clamor es puro y sincero no importa el sexo ( se ríe)

Regina. Doctora el paciente me esta molestando (la doctora se para e interroga)

Rita a mi también

Josefina Que les ha dicho o que les ha hecho

Regina me ha dicho que soy hermosa

Rita que yo tengo un cuerpo de reina (se contonea) (Josefina molesta se dirige al paciente)

Josefina Pedro por qué le dices así a las enfermeras, ¿Qué, estás ciego, no ves, porque las prefieres? No te has dado cuenta que yo también tengo mis cosas, (lo dice toda coqueta y se da la vuelta. Luego se pone seria)

Julio si esta buena la doctora que hasta yo quisiera ser el siguiente paciente.

Josefina Señoritas enfermeras, díganme, ya se le ha normalizado todo al paciente.

Regina Si doctora, ya sus funciones vitales se han normalizado y se siente mejor.

Josefina. Bien, formidable, entonces le voy a dar su receta (empieza a escribir en el recetario) luego le explica. Va a tomar estas gotas tres veces al día, escuche que le digo que lo va a tomar por la boca. No vaya a ser como el otro paciente de la vez pasada que le di el mismo tratamiento y no sanaba, que ocurría que no se tomaba las gotas sino se lo frotaba en el pecho el muy vivo…

Ahora, escúchenme bien los dos, tu María y Pedro, Terminantemente prohibido el cigarro, el licor (escuchaban atentamente los dos mientras  Josefina  seguía dando sus recomendaciones). Toma atención María y te lo digo a ti especialmente porque tienes una cara de golosa que se te nota de lejos, nada de sexo por lo menos un mes. De lo contrario puede recaer y las consecuencias pueden ser más graves de lo que se imaginan.  

Julio (Burlándose)  Tienes que alejarte de las trampas y de tus comadres y de….

María (Muy  preocupada caminaba de un lado para otro) Doctora pero por qué tiene que ser así, yo pensaba que todo era pasajero.

Josefina, Es que las enfermedades del corazón no son un juego, usted es joven comprendo su desazón pero les recomiendo abstinencia sexual total, es que tiene que tener calma absoluta, nada de excitaciones ni emociones fuertes. Ya lo saben.

Julio, eso tenía que pasarte algún día por jugador (burlándose)

María. Dios Mío lo único que faltaba…Que mala suerte (muy triste y preocupada)

Pedro, (cabizbajo) bueno, no me queda otra cosa que cumplir con sus consejos doctora. Si usted lo dice, así será. Pierda el cuidado (Mueve la cabeza resignado a su suerte)

Regina pero no es para tanto, mientras más se cuiden  mejor para ustedes, ya luego una vez sano, ustedes pueden continuar su vida normal (se los dice a manera de consuelo)

Rita, cierto señor, una vez que recupera su salud  hasta se pueden irse a una segunda luna de miel, si ustedes me parecen que hacen una excelente pareja. (Los abraza a los dos)

Julio perdonen, pero aquí hay un error… (iba a seguir hablando pero es interrumpido por Josefina y Julio se calla sorprendido)

Josefina y usted María que me dice acerca de todo lo que les he recomendado.

María (toda resignada) Si yo hubiera sabido de todos los cuidados y prohibiciones que debe tener Pedro, le hubiera avisado a su esposa para que ella mismo la escuche a usted y tome las precauciones del caso, porque la verdad de todo es que yo solamente soy  la cuñada de Pedro (enfatiza esta última parte).

Se toman de las manos todos y dirigiéndose al público dicen con voz fuerte, al mismo tiempo

¡VIVA LA SALUD MENTAL!

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *