El rey de la cofradía cuando su trono ha perdido fingiendo su humana vía denota humano sentido.

Solo el ser de fina esencia con sincera identidad al ser fuente de sapiencia puede ser autoridad.

El amor por la cultura es un perenne activismo si de un puesto cobra altura tan solo es oportunismo.

El títere del poder por ser nulo de objetivos además de obedecer solo finge positivo.

Hacer gala de poder a espaldas de poblaciones es propio de oscuro ser que no cumple sus funciones.

El que marcha a la cabeza tras mentira y ambición al carecer de realeza le queda grande el sillón.

Frente abundante injusticia en el espacio mundial ¿Quién pondrá fin a impericia? En el orbe universal.

Quien ejerce una función en diferente carrera el éxito no prospera por distinta formación.

Ante el entorno insensible habiendo quien no ama al arte fiel cultor por invencible con fina gracia comparte.

El aparente baluarte quien no es de sólida esencia sí lo tientan con mal arte denota su incompetencia.

Si hay extrañas influencias en el interno objetivo son oscuras deficiencias que dan orbe negativo.

Si no hay el conocimiento con una clara conciencia al carecer de cimiento no se logra trascendencia.