El quererte es como un sueño
más por nada es ilusión
por eso en tu amor me empeño
para darte adoración.
No creo que sea tarde
Para ingresar a tu mundo
sí anhelo el gozo fecundo
que en tu pecho a diario se arde.
Ojalá que tu alma guarde
sin horizonte pequeño
tierno afán que sea el dueño
de tus ansias de mujer,
meditando por doquier
el quererte es como un sueño.
II
Las distintas realidades
que alejados nos mantiene
la eterna duda retiene
y originan ansiedades.
Más trataré con verdades
su feraz explicación
y es que tiene solución
cuando existen nobles lazos,
imaginarte en mis brazos
más por nada es ilusión.
III
De la miel de ajena boca
en mis labios aún me queda
más del tuyo al ser de seda
me niega tu ser de roca.
Soy por ti el que más se aboca
como si fueras ensueño
y muy fiel me desempeño
ganándome tu hermosura,
al darme luz tu figura
por eso en tu amor me empeño.
IV
No es capricho lo siento
es afecto en realidad
es que te amo de verdad
que el no verte es desaliento.
Estás en mi pensamiento
como una alegre canción
y me llenas de emoción
más no despejas mi bruma,
es que el tiempo se me esfuma
para darte adoración.
V
Estoy, pero muy seguro
que sólo seré dichoso
si tu ser tan fragancioso
me da su cariño puro.
Ni tendré horizonte oscuro
y mi vida será amena
nunca habrá el vil que frena
lo que en mi entraña es un grito,
más si adorarte es delito
no me importa la condena.
VI
En tu grácil comprensión
está en juego mi destino
de aceptar mi bello trino
tendrás sabia decisión.
Deja que tu corazón
por ser pleno de bondad
me elija con propiedad
a ser yo tu enamorado,
es que no más a tu lado
hallaré felicidad.
