Mi poco tiempo de vida
señalando va el final
me ha dejado tu partida
clavado en mi alma un puñal.

Para ti fue muy correcto
de tu existencia borrarme
y sin duda al olvidarme
más heriste mi intelecto.
Acaso no fue perfecto
cuando me diste cabida
cual una estrella encendida
fecundaste una ilusión,
hoy determina tu acción
mi poco tiempo de vida.
II
Al quedarme solitario
me consumió la tristeza
ni mi tan noble entereza
conmigo actuó solidario.
Tuvo efecto lapidario
que diría hasta mortal
y por tu ausencia letal
fue en mi ser determinante
es que tu marcha agobiante
señalando va el final.
III
Tu fortuito alejamiento
me dio un golpe fulminante
pues me puso agonizante
confundido y sin aliento.
Por eso sólo me siento
con la esperanza perdida
y no te importó mi herida
actuando aun sin piedad,
en completa soledad,
me ha dejado tu partida.
IV
Desde ahí vivo un calvario
donde todo es sufrimiento
y es tan grande mi lamento
que tu acción me duele a diario.
Sin aire vivo el horario
junto al instante fatal,
en mi delirio total
empezar no, de nuevo,
pues no te acuerdas que llevo
clavado en mi alma un puñal.
V
No te creí tan capaz
de consumar duro daño
a pesar que no fue engaño
tu actitud fue muy falaz.
Hay pesadumbre en mi faz
ante presencia de encono
por tenerte anduve a tono
más hoy día al ya no verte,
el gris dolor de la muerte
menor es que tu abandono.
