Al ser oscura mi cumbre
por negarme tu bondad
al no tener quien me alumbre
agonizo en mi orfandad,

Desde que sin despedirte
decidiste nueva ruta
ante forma resoluta
nunca supe que decirte.
Pues lograste convertirte
en mujer que me deslumbre
y en el ser que más vislumbre
por la cual mucho sufría,
es que el no verte me hería
al ser oscura mi cumbre.
II
Mi existencia tan vacía
se hizo inútil sin gran luz
ni siquiera dura cruz
en mis hombros la podía.
El dolor me consumía
pues lo mío era verdad
amor puro en realidad
que no sentía tu aporte,
era náufrago sin norte
por negarme tu bondad.
III
Cuando todo era armonía
era a diario tu presencia
que después tu larga ausencia
apagó mi sinfonía.
Me motivó tu valía
ser persona que se encumbre
aquella que más relumbre
pero al marcharte morí,
mi rumbo hasta lo perdí
al no tener quien me alumbre.
IV
Así el tiempo transcurría
germinaste comprensión
esperanzada intención
de volverte a ver un día.
Más la cruel tristeza impía
azotaba de verdad
es que tu sin más piedad
me dabas muerte incesante,
al verte siempre distante
agonizo en mi orfandad.
V
Por eso tu afecto dame
pues no verte es mi tormento
es que borras mi lamento
aunque no dejes que te ame.
No es que de algo te reclame
exigiendo tu pasión
eres dueña de tu acción
y tiene que ser nacido,
anhelo ser muy querido
sin forzar tu decisión.
