Quien depende de lo ajeno
por importados quehaceres
no vive en un mundo pleno
por extraños pareceres.
Por la comunicación
y afines redes sociales
aprenden nuevos modales
de distinta concepción.
Se pierde la tradición
ante acogida sin freno
y de admiración bien lleno
lo hace propio noche y día,
careciendo de valía
quien depende de lo ajeno.
II
Se le acoge a la comida
o a diferente ropaje
compartiéndose el bagaje
a nueva forma se anida.
El uso se consolida
en variados menesteres
y genera hasta placeres
por continua complacencia,
llegando hasta la inconciencia
por importados quehaceres.
III
En arreglo personal
es la cosmetología
que de lo externo se guía
y le queda colosal.
Del peinado es por igual
pues se confirma que es bueno
y el personaje sereno
de afuera adquiría el modo,
el que se copia de todo
no vive en un mundo pleno.
IV
El quien cambia por completo
hasta en el juego del niño
le va agarrándole cariño
que hasta se muestra respeto.
Hay quien luce porte neto
tanto en hombres y mujeres
y entusiasmado los seres
no valoran su lugar,
dejándose conquistar
por extraños pareceres.
V
No es ninguna obligación
depende quien lo ha buscado
al venderse en el mercado
adquirirlo si hay razón.
Lo que viene de ocasión
es negocio en realidad
y ante la casualidad
de tan fácil proceder,
si uno mismo hay que ser
conservando identidad,
VI
Si se valoran raíces
lo de casa es lo primero
pues da estado placentero
por novedosos matices.
A todos hace felices
derrochando calidad
y por su efectividad
delegarlo como herencia
luciendo nítida esencia
de sutil peruanidad.
