De tus labios, su ambrosía
acrecientan mi candor
cada cariño es la vía
para encender nuestro amor.

Por tu mágica belleza
que origino acercamiento
despertó fiel sentimiento
al prodigar tu entereza.
Ante visible realeza
me sirvió de fértil guía
pues el haz de tu armonía
fue razón de enamorarme,
fue razón de enamorarme,
ansiando miel impregnarme
de tus labios, su ambrosía.
II
Lo demás cayó del cielo
por selecta afinidad
se conjugó tu bondad
con la fuerza de mi anhelo.
De ahí te aflora consuelo
si no hay mi aureola de flor
e incentivas mi furor
por tu imagen seductora,
tus dones que se atesora
acrecientan mi candor.
III
Te imagino en mi memoria
tentadora y deslumbrante
por ser dama fascinante
comparto vibrante euforia.
Envueltos en misma noria
bajo cálida energía
contagia tu algarabía
logrando que me alboroce,
hacia el más sublime goce
cada cariño es la vía.
IV
Por idénticos sentidos
cualquier espacio vital
es vasto lecho nupcial
para terminar unidos.
Adivinamos latidos
y tras arrullo, el ardor
motiva libre calor
desde que inicio abrazarte,
me basta solo estrecharte
para encender nuestro amor.
V
Al ser fuente de ternura
donde el querer no es promesa
tu figura me embelesa
embriagando tu dulzura.
Teniendo una esencia pura
de infinita calidad
haya dicha en libertad
desbordando placidez,
desbordando placidez,
para que reine a la vez
eterna felicidad.
