La muerte al cuerpo silencia
el final se consolida
espíritu forja esencia
generando la otra vida.
Después de una corta estancia
o de larga senda si es
tumba al fin sella el revés
tras mínima relevancia.
El dolor borra jactancia
Hay pésame a descendencia
más brillante efervescencia
está ausente en la partida,
sin la riqueza obtenida
la muerte al cuerpo silencia.
II
Solo tiene vela y flores
en cementerio silente
de luto vestida gente
le reza en alrededores.
Fenecen gratos candores
claro afecto luz convida
persiste la fe encendida
pero ya nada es posible,
entre llanto incontenible
el final se consolida.
III
Los dotes del moribundo
más bienes que haya logrado
no se lo lleva el finado
al marcharse de este mundo.
Cesó el latido profundo
acabando la existencia
y toda la pertenencia
solo queda en la memoria,
mientras se escribe la historia
espíritu forja esencia.
IV
Antes que llegue el olvido
hay visita al camposanto
poco a poco por quebranto
ya no hay tanto adolorido.
Se acostumbra a lo perdido
es una ley definida
más como calma se anida
no reincide el desconsuelo,
va su alma en el alto cielo
generando la otra vida.
V
De acuerdo a la religión
en plena divinidad
goza de felicidad
en edénica mansión.
Se tiene resignación
que está en espacio fraterno
alejado del averno
por el celestial remanso,
bendecido por descanso
en los brazos del Eterno.
