El amor que has despertado
ya no sé cómo explicarte
no habiendo el habla creado
que el tan solo acariciarte.
Con el lenguaje corriente
que se dice en las mañanas
no te trasmiten mis ganas
de abrazarte complaciente.
Es que tú eres diferente
pues si no estas a mi lado
al ser un cofre apreciado
hasta quisiera buscarte,
más no sé cómo narrarte
el amor que has despertado.
II
Con el verbo singular
que conversa toda gente
no puedo hacerte presente
de tu belleza sin par.
Cuando quiero sin cesar
por lo que eres alabarte
no hallo forma de explicarte
lo que siento con ardor,
la voz de mi ser interior
ya no sé cómo explicarte.
III
Con la palabra sencilla
que se dice en toda parte
no puedo comunicarte
tus dones de maravilla.
Mi cerebro se encasilla
y lo que tengo pensado
como si fuese borrado
se me va cual fuera un niño,
ni te expreso mi cariño
no habiendo el habla creado.
IV
Con el vocablo del día
Donde no encuentro sentido
cómo decirte al oído
que yo te amo reina mía.
Es tan grande mi alegría
Junto a ganas de contarte
más que nada bien hablarte
y al ser poco mi intelecto,
no hay nada por más directo
que el tan solo acariciarte.
V
Es por eso al abrazarte
mientras juego con tus manos
en tus cabellos galanos
digo, así prefiero amarte.
Que muero por estrecharte
rodeando tu talle hermoso
y tu cuerpo esplendoroso
dando sitio a mi embeleso,
arrullarte con un beso
pues de tu ser voy ansioso.