Al contemplar tu silueta
toda llena de virtud
en tu sonrisa coqueta
hallo eterna juventud.
En tu risa contagiante
hay la música del río
que a la bruma del estío
has borrado en mi semblante.
Me das rumbo apasionante
y una visión más concreta
pues mi senda va sujeta
del compás de tu emoción
encendiendo mi pasión
al contemplar tu silueta.
II
Por la magia femenil
ante prístinos modales
se acrecientan los caudales
frente al más bello perfil.
Del flamear de tu candil
me das vida a plenitud
alimenta mi aptitud
de que pude conocerte,
me alegras de todo al verte
toda llena de virtud.
III
No me explico la razón
me obsesiona tu figura
debe ser por la ternura
de tu joven corazón.
Voy pendiente de tu acción
diseñándote una meta
y eludiendo toda treta
a tus albores me entrego,
hasta encuentro buen sosiego
en tu sonrisa coqueta.
IV
Mujer de esencia brillante
al ser buena y complaciente
estás grabada en mi mente
que te recuerdo al instante.
Tu presencia al ser fragante
ha turbado mi quietud
y genera en mi inquietud
una dulce melodía,
por eso en tu compañía
hallo eterna juventud.
V
Tu belleza es especial
en mi ser has despertado
un deseo inesperado
de quererte por igual.
Eres más que un ideal
necesario en mi vivencia
por eso anhelo tu esencia
y recorrer fiel camino,
edificando el destino
que da gloria tu existencia.
