Al darme tu compañía
donde el afecto coincide
por despertarme armonía
la dicha en mi ser reside.
Para del alma quererte
ni un instante te he buscado
a mi sola tú has llegado
que no quisiera perderte.
Mi ser que yacía inerte
inyectando tu alegría
hoy irradia lozanía
y luce encendida flama,
que te valoro mi dama
al darme tu compañía.
II
Como cosa del destino
hay afines sentimientos
que nos mantiene contentos
bajo el arrullo de un trino.
Por eso ofrendo un camino
y al ser yo quien te lo pide
si tu entraña se decide
tendrás en mi alma un lugar,
más te pondré en un altar
donde el afecto coincide.
III
Hay sutil correspondencia
entre nuestras actitudes
en honor a tus virtudes
compartimos grata esencia.
Es que activas mi conciencia
desde que amanece el día
y acabas mi noche fría
con tu sonrisa de sol,
que te amaré sin control
por despertarme armonía.
IV
Felicidad he tenido
más no como tú me das
lo tuyo es noble y verás
como jamás he sentido.
Por eso mi ser ungido
en estrecharte reincide
es que el cariño se mide
cuando hay sincera emoción,
que al tener tu comprensión
la dicha en mi ser reside.
V
No interesa ni la edad
Solo estar enamorado
Para vivir a tu lado
por toda una eternidad.
Existir en realidad
Sin que el tiempo retroceda
para amarte hasta que pueda
sin que haya tiempo perdido,
formando tan solo un nido
por la vida que nos queda.
