Al encontrarte te observo
más hermosa que otras veces
como tu imagen conservo
en mi recuerdo amaneces.
Va creciendo tu belleza
como una sombra en la noche
es que siempre haces derroche
de una amable sutileza.
Se agiganta tu grandeza
con la magia de tu verbo
pues despliegas un acervo
que a mi espíritu hace bien,
igual que ángel del edén
al encontrarte te observo.
II
Del paisaje del ensueño
donde tu eres la princesa
por tu forma que embelesa
eres más que un grato sueño.
Resulta el mundo pequeño
cuando a mi lado apareces
al no haber exquisiteces
para alegrar tu semblante,
es que te veo al instante
más hermosa que otras veces.
III
Tu cabello recogido
con tu rostro al natural
te da porte señorial
y un encanto desprendido.
Por eso a tus pies rendido
a ratos soy quien me enervo
más mi calma la reservo
sí me niegan ser tu amante,
en mi mente vas radiante
como tu imagen conservo.
IV
Habita en mi corazón
tu figura impresionante
un fragor de tu semblante
hasta embriaga mi razón.
Eres dulce sensación
que en mi entraña resplandeces
y por siempre permaneces
cual intermitente faro,
siendo en ti que yo me amparo
en mi recuerdo amaneces.
V
Por eso luz de mi ser
acepta mi amor fraterno
pues mi afecto será eterno
porque te adoro mujer.
Lo que nunca tuve ayer
hoy me das con tu mirada
la más preciosa alborada
que jamás un día vi,
es que no hay igual a ti
te juro mi bella amada.