El que promueve cultura
sí presupuesto no tiene
su gestión es senda oscura
que oportunismo mantiene.
Cuando el arte hay quien difunde
cumpliendo con lo que ofrece
el que suplanta aparece
y la realidad confunde.
El convence aunque redunde
más no luce sabia pura
con su falsía procura
obtener un buen sitial,
aparenta ser formal
el que promueve cultura.
II
Quien del arte siente amor
en caso no fuera artista
es tan solo oportunista
que aparenta conductor.
Por un sueldo da furor
haciendo lo que conviene
sensibilidad ni tiene
cómo entender al baluarte,
de impostor luce gran parte
sí presupuesto no tiene.
III
Donde no existe el talento
fingiendo capacidades
se apunta sin cualidades
como si fuera un portento.
De arriesgarse es el momento
y camuflando su altura
su sueldo se lo asegura
sin conocer la misión,
al no dar la solución
Su gestión es senda oscura.
IV
El que tiene posición
aparte forja valores
a colegas da furores
pues dar ruta es su misión.
Si tan solo es de ocasión
y su ambicia lo entretiene
lo que es muy real contraviene
denotando displicencia,
es notoria su inconciencia
que oportunismo mantiene.
V
Quien no luce ocupación
sin los dones absolutos
inventa sus atributos
para ejercer la función.
Obstinado y sin visión
por su delirio se enquista
más no irradia fe optimista
pues distanciado es del tema,
se nota que ante el problema
está fuera de la pista.
VI
Es por desconocimiento
que impera el improvisado
un ser nulo es contratado
por quien no tiene cimiento.
No hay por tanto fundamento
y donde hubiera inventiva
a valores no motiva
al ser inepto casual,
culpa es del informal
al no haber iniciativa.
