Al ser tu ausencia un castigo
con ansias la noche espero
para soñarme contigo
amándote como quiero.
Tu conducta me atormenta
me hiere tu lejanía
que te busco noche y día
pues mi dolor representa.
Eso nada me contenta
a mi pena no mitigo
si tus halagos persigo
más tu ser no se conduele,
el recordarte me duele
al ser tu ausencia castigo.
II
Estar juntos no es posible
tu bien sabes la razón
al no llegar la ocasión
mi abandono es increíble.
Se hace a ratos imposible
a pesar que yo te quiero
y en verdad me desespero
al no tener tus albricias,
por brindarte mis caricias
con ansias la noche espero.
III
Me acostumbré a tu presencia
siendo grácil compañía
en honor a tu valía
tu partida me sentencia.
Por eso toma conciencia
que del alma yo te digo
por adorarte prosigo
de mi afecto hacer derroche,
que busco la medianoche
para soñarme contigo.
IV
Como una extraña novela
surgen mis sueños candentes
más ni por ser tan ardientes
a mi anhelo se consuela.
En mi ser tu faz revela
que mi arrullo es verdadero
y al estrecharte primero
te abrazo tibia y fragante,
me contemplo en ese instante
amándote como quiero.
V
Formamos un solo ser
en tan volcánica hoguera
y te siento llama entera
con tu fuego de mujer.
Te recorro por doquier
bajo una entrega total
mientras la miel especial
de tu boca me hace efecto,
lo que nunca hago en directo
en mi ensueño se hace real.
VI
Desesperado despierto
por el placentero gozo
mer ha llenado de alborozo
la frescura de tu huerto.
La fiel savia que en ti vierto
frente a respuesta vital
mutua hay brisa espiritual
y aspiro se perennice,
ansío al fin se realice
mi delirio nocturnal.