El que gana en elecciones
si no es cincuenta por ciento
no hay del pueblo aceptaciones
por no grato su argumento.
Si no hay programa atractivo
para ejercer un gobierno
no surge el voto fraterno
por el afán correctivo.
Sin planteamiento efectivo
desiguales opiniones
ante diversas visiones
va sin rumbo solidario,
al no ser un visionario
el que gana en elecciones.
II
Frente a exceso de partidos
pero existe quien merece
ideal si prevalece
sin que abunden confundidos.
No haya tantos desunidos
buen sólido pensamiento
y el que derrocha talento
sea ejemplo de valía,
más no llamar mayoría
si no es cincuenta por ciento.
III
Si hay distintos pareceres
los criterios se unifiquen
en lugar que se critiquen
direccionar los quehaceres.
Sin distanciar menesteres
analizar posiciones
y trqs nimias variaciones
se armonice toda acción,
que ante la improvisación
no hay del pueblo aceptaciones.
IV
Dan cabida al resultado
de acuerdo a la realidad
y todos con dignidad
reflexionan con agrado.
Asumir lo programado
asegurando cimiento
más se afiance el fundamento
del que tiene vocación,
pues existe el sin razón
por no grato su argumento.
V
Si el porcentaje es menor
a lo que es mitad más uno
el poder no es oportuno
por el distinto elector.
En tal caso lo mejor
es oír en todo instante
al ciudadano brillante
aun con sentido adverso,
que por el voto disperso
no es real el gobernante.
VI
No deslucir las verdades
y revisar proyecciones
en aras de promisiones
afianzar las calidades.
Al que tiene cualidades
se le apunte a toda acción
por novedosa visión
que haya la oportunidad,
pues es fin de autoridad
buscar la concertación.
