La forma que es el humano
lo denota en su actitud
sí es de afecto soberano
es cual fuente de virtud.
Todo ser en sociedad
aun sin la formación
tiene un trato en cada acción
que le otorga identidad.
Esa grácil heredad
trasluce su don galano
y si a todos da la mano
a su imagen la engrandece,
en su conducta aparece
la forma que es el humano.
II
Más hay quien todo aparenta
hasta finge cualidades
y asume genialidades
cuando nada representa.
El atributo se aumenta
creando vicisitud
frente a cruel ineptitud
en el fondo es incapaz,
pues ni busca amor y paz
lo denota en su actitud.
III
No falta el ser imponente
que solo adquiere sapiencia
para lucir eficiencia
y dominar el ambiente.
Aprovecha su torrente
previos aires de tirano
pues con la fe de temprano
debe lucir equidad,
aflorándole bondad
sí es de afecto soberano.
IV
Hay el de nimio atributo
más publicita grandeza
su tan mentada presteza
no lo vuelve resoluto.
Nada innova en absoluto
solo emite su quietud
repetir no es inquietud
por ajeno a la invención,
el de ecuánime actuación
es cual fuente de virtud.
V
Por eso prestar confianza
o asumir ideologías
hay que evaluarse las vías
antes de hacer una alianza.
Solo el respeto se afianza
sí es un consciente intelecto
que no camufla el defecto
presumiendo de eminencia,
pues se añora la eficiencia
en lugar del vil defecto.