Al haber la fe perdida
donde más prima el temor
no es correcto en esta vida
convivir entre el dolor.
Por gozar la protección
Que el poderoso concede
El servil que a todo cede
se arrodilla a condición.
No le importa si hay presión
con tal de tener comida
más siendo el que no convida
del éxito no es indicio,
hay que volver al inicio
al haber la fe perdida.
II
Cuando el chisme fuerte sopla
al de vasto sentimiento
se le acalla el pensamiento
si al de turno no se acopla.
Muy poco si ya resopla
alabando al gran señor
cae presa del rumor
del que sin duda lo asedia,
trascendiendo la tragedia
donde más prima el temor.
III
Levantar alto la voz
si la injusticia más crece
y de lo que fortalece
hay que ser el portavoz.
Ya no más el golpe atroz
del que ataca en la partida
repeler su acometida
sin aceptar la propuesta,
que aguantar sin más protesta
no es correcto en esta vida.
IV
Aceptar a lo que viene
pero sin acostumbrarse
y lo malo desecharse
si por malo no conviene.
Quien insanía retiene
es no más que un malhechor
por eso sin más candor
censurar su atrevimiento,
sin permitir un momento
convivir entre el dolor.
V
Así obligue el fiero grito
que se paren de cabeza
toda marca de bajeza
permitirlo es inaudito.
Con un arranque fortuito
al venir del mismo averno
si propone el ni fraterno
desterrar el cuento iluso,
no aceptando el cruel abuso
por ser rasgo del infierno.