El que oculta lo que es cierto
En aras de protección
su futuro será incierto
al ser más que vil traición.
Nunca falta en la ciudades
quien con abusiva audacia
utiliza la falacia
en lugar de honestidades.
Sin mayor legalidades
como si fuera un acierto
no avizora ningún puerto
con visible conformismo,
yendo de frente al abismo
el que oculta lo que es cierto.
II
Si no sigue la corriente
al que tiene el don de mando
a la zaga va quedando
por no ser tan consecuente.
Ante el acto deficiente
De camuflada visión
se le censura su acción
y hasta pierde la batalla,
pero hay quien de todo calla
en aras de protección.
III
Aunque perdido hoy abunda
el que emite falsedad
de esa misma impropiedad
existen con hiel fecunda.
Toda la calle se inunda
del más vano desacierto
y entre el aroma de muerto
va con tono displicente,
es que si al pueblo le miente
su futuro será incierto.
IV
Después de un tiempo de gloria
con el dedo lo señalan
pero por nada lo avalan
por parecido a la escoria.
Sin una fuerza aleatoria
va girando hacía el rincón
y por mala su intención,
se le mira con desprecio,
pues no merece el aprecio
al ser más que vil traición.
V
Influye como una plaga
en terreno sin cultivo
y por creerse muy vivo
hay el necio que lo halaga.
Más de pronto caro paga
por su injusta intromisión
pero eludiendo sanción
se baraja el arrebato,
si por aquel mentecato
sigue el mal sin solución.