Cumplir el más caro anhelo
sin premio brindar la mano
permite elevar el vuelo
en el orbe soberano.
El dar genera la gloria
que el recibir no lo es tanto
si es que se borra el quebranto
compartir tan digna euforia.
Engrandecer otra historia
donde satura el desvelo
es convertirse en consuelo
sin pasar de falso adorno,
más para bien del entorno
cumplir el más caro anhelo.
II
Habiendo horizonte oscuro
aser una lumbre sutil
esclareciendo el perfil
delegar sendero puro.
Si por fortuito el apuro
aparece con desgano
el vencerlo es muy galano
solo de mente fraterna,
a lo que da noria eterna
sin premio brindar la mano.
III
Frente a la cruel inconciencia
destruir la mezquindad
con fiel virtud divinal
afinar la competencia.
Tras ferviente efervescencia
dejar de lado el recelo
y libre del blanco velo
darle ruta a proyecciones,
que apoyar sin condiciones
permite elevar el vuelo.
IV
Adquirir conocimientos
pero no para ambiciones
si no tras innovaciones
renovar los pensamientos.
Darle norte a sentimientos
con el afecto de hermano
y sea reflejo humano
de fulgor inmarchitable,
siendo un astro inapagable
en el orbe soberano.
V
Aspirar a posiciones
muy de acuerdo al atributo
y jamás irresoluto
apuntando a direcciones.
Hay que ser de convicciones
que muy afín a su rol
sin aparentar crisol
se eleva ante débil luz,
cargando juntos la cruz
al ser haz de tibio sol.
VI
Ser la fuente de bondades
y paraje del amor
irradiando fiel candor
honrando a las cualidades.
Desechar las mezquindades
con la música del verso
y en espacio, grácil, terso
sin ego, ni adversidad,
exista plena hermandad
en la faz del universo.
