Si ya no estás para amarte
compartiendo un fiel candor
solo queda el recordarte
al estar vivo tú amor.
De que llegaste a mi vida
se llegó a cumplir mi sueño
hallé en tu rostro halagüeño
la faz de luna encendida.
Renació mi fe perdida
con tan solo el abrazarte
y al ser quien la paz comparte
me diste gloria sublime,
que la nostalgia me oprime
si ya no estás para amarte.
II
No eras de encanto selecto
cual astro de luz galana
pero eras la flor humana
que despertabas afecto.
Consumamos todo aspecto
en cielo multicolor
y bajo mutuo fulgor
dando eco a mis latidos,
caminamos muy unidos
compartiendo fiel candor.
III
Generaste afinidad
de profunda solidez
y con clara sensatez
eras astro de bondad.
Afloraste cualidad
que imposible es olvidarte
pues la dicha supe darte
desde que te conocí,
al estar lejos de ti
solo queda recordarte.
IV
Fueron años de armonía
en las buenas y las malas
pero no faltaron galas
compartiendo a tu valía.
Por eso de noche y día
me embargaba tu fulgor
y tu embriagante calor
era llama incandescente,
que en mí ser irás presente
al estar vivo tú amor.
V
Éramos dos contra el mundo
con fuerzas espirituales
y las venias divinales
nos daban norte fecundo.
por tu cariz tan profundo
en horizonte sincero
edificaste un sendero
para mi arte desprendido,
mostrando que has comprendido
que lo mío es verdadero.
VI
Nuestro idilio fue expresión
del sentimiento más puro
que borrando el orbe oscuro
era un himno de pasión.
Fue un poema hecho canción
hasta ahora luz siguiere
y porque no desespere
yo te seguiré queriendo,
pues por lo que voy sintiendo
es cariño que no muere.