Al ser la flor de la esencia
que le da al alma color
es negarse a la existencia
quien no da espacio al amor.
Al ser amplia la acepción
interviene en todo un acto
y con el ser hace pacto
dando fuerza al corazón.
Si se trata de pasión
origina complacencia
siendo pura efervescencia
da la dicha por doquier,
cuando reside en el ser
al ser la flor de la esencia.
II
En toda humana actitud
se demuestra en varias formas
respetándose las normas
de todo ser virtud.
Refleja fiel aptitud
al ser eco del candor
y al delegar esplendor
no se precisa de un ruego,
si es el dulce y real sosiego
que le da al alma color.
III
Toda persona es capaz
de brindar al semejante
un candor impresionante
dando horizonte solaz.
Cada uno es muy capaz
compartiendo su evidencia
y al hallar correspondencia
mutuo se haga tal dialecto,
que el no expresar un afecto
es negarse a la existencia.
IV
En cuerpo y alma, constante
al trabajo hay quien se entrega
ante un cariño más juega
al no hallarlo deslumbrante.
Si se comporta arrogante
y no acepta tal furor
más al perderse el fervor
a su entraña no conquista,
y acaba siendo egoísta
quien no da espacio al amor.
V
Al ser divina expresión
hay que ser materialista
para sacarlo de lista
y no prestarle atención.
Si es la que otorga visión
de querer a una persona
y la visión dimensiona
elevando al pensamiento,
más quien obvia un sentimiento
siempre tarde reflexiona.
VI
Es el más grande valor
lo identifica al humano
otorga un mundo galano
e infinito resplandor.
Obra es del Hacedor
departir su inmensidad
y en honor a la verdad
no hay nada que lo reemplace,
quien a tiempo nunca lo hace
no ha vivido en realidad.
06-01-2018