Quien del trabajo se adueña
A todos deja sin pista
al ser un vil egoísta
en su avaricia se empeña.
A más de uno lo desdeña
Por su bajeza inhumana
Y sin valores se ufana
Muy propio del negativo,
Más si fuera proactivo
FORJA EL PERÚ DEL MAÑANA.
II
Ya no haya el genio que sale
pues sin ganarle a ninguno
Igual que el inoportuno
Casi en nada sobresale.
A mal crítico equivale
Por su oscura mezquindad
Y ante su mediocridad
Su fama muy poco dura,
Que nacerá la cordura
SI HAY NUEVA MENTALIDAD.
III
No más haya el ser de moda
que acapara todo puesto
olvidándose del resto
más que su gente acomoda.
Su cofradía aunque enloda
la camufla y ruta gana
pero injusticia que emana
al fiel albor dilapida,
que nunca será su vida
CON ESENCIA SOBERANA.
IV
Ya no más el vano aliento
De aquel sabio envanecido
Es mejor el desprendido
deparando buen cimiento.
Se acabe el falso elemento
Que por ayer de orfandad
No tuvo oportunidad
Y hoy se venga del pasado,
Más no marcha santiguado
¡PLENO DE ECUANIMIDAD!
V
Para qué el inversionista
si el dinero es su pasión
a punta de explotación
El oro oscuro conquista.
Esa gente ya no exista
Que al dolo a diario lo admite
y al abuso se remite
respondiéndole al desprecio,
solo culpable es el necio
COMO QUIEN SE LO PERMITE.
VI
Si existe la corrupción
Es por mafia numerosa
Y su actitud tenebrosa
Incentiva su ambición.
Su meta es la posesión
No importa medios vedados
Que terminan acusados
ante indignante ruindad,
Pues ocultan la verdad
¡POR INTERESES CREADOS!