Hay quien pierde la mesura
Sin motivo convincente
Y de manera frecuente
Echa barro a la cordura.
Pierde rápido su altura
Por su trato inconfundible
Y por violencia increíble
Perturbado queda el alma,
Y quiebra toda la calma
EL DE CONDUCTA IRASCIBLE.

II

Resulta poco paciente
De carácter furibundo
Que se avinagra al segundo
Por sulfurado inconsciente.
Hace un daño deprimente
Por colérica expresión
Y ante opaca dimensión
En su imagen es defecto,
Y trunca todo proyecto
¡SINO LUCE COMPRENSIÓN!

Quien a todo pone pero
Por su afán perfeccionista
Oculta su real arista
En la que no hay tanto esmero.
Al contrario es en su fuero
Por la improvisación
Más reclama fina acción
Con algo de prepotencia,
Y es que aflora su inconciencia
POR SU FALTA DE RAZÓN.

III

Amenaza siempre airado
De lo que no es importante
Y sin la causa flagrante
Lo pasa malhumorado.
A cada instante enojado
Si no le cae su rol
y si por nada es crisol
en el dolo no hace pausa,
Y abunda el sin una causa
EXPLOTA SIN MÁS CONTROL.

VI

Si hay la ira sin recato
Es por desfase mental
Y el tratamiento especia
Lo requiere de inmediato.
No refleja lo insensato
Sino un enfado increíble
Y por su  rabia infalible
Es iracundo a la vez,
Y por gris inmadurez
HACE LA VIDA IMPOSIBLE.

Es el eterno furioso
Y fácilmente excitable
Más por feraz irritable
Es resentido impetuoso.
Es por nada generoso
Pues furor es que  retiene
Y si afecto no mantiene
Avinagrado subsiste
Y quien le soporta existe
¡SI BENEFICIOS OBTIENE!