Al ser única vivencia
que dispone el ser mortal
hay que amar a la existencia
antes que llegue el final.
Habitar el universo
es no más que bendición
por eso con suma acción
dar cabida al orbe terso.
Ni por distinto y diverso
no dañar la consistencia
y sin vana competencia
nunca andar con tanto brinco,
adorarla con ahínco
al ser única vivencia.
II
Residir en el planeta
es no más para el disfrute
y no esperar que se enlute
añorando toda meta.
No dando entrada a la treta
ir por la senda triunfal
junto a fuerza espiritual
generar su misma historia,
si es el camino de gloria
que dispone el ser mortal.
III
Con mucho afán creativo
al problema dar salida
y con aura desprendida
avanzar muy positivo.
Si abunda el tono afectivo
viene la magnificencia
sin la vana displicencia
dar un sitio a la natura,
en vista que poco dura
hay que amar a la existencia.
IV
Dar cabida a la hermosura
de aire, cielo, mar y tierra
y eliminado la guerra
que se actúe con mesura.
Si hay un halo de cordura
el entorno sideral
dará ruta en especial
horizontes conocidos,
distrayendo los sentidos
antes que llegue el final.
V
Sin la contaminación
que se alcance el bienestar
de una manera ejemplar
afianzar la proyección.
Generar la promisión
en el vasto continente
y con obras solamente
aperturar calidades,
gozando de las bondades
del espacio diariamente.
VI
Ajeno a la mezquindad
compartir lo que se tiene
y haciendo lo que conviene
surgir sin mediocridad.
Rendir culto a la amistad
con el afecto profundo
tras derrotero fecundo
al instante dar sentido,
siendo muy corto el latido
no hay que perder un segundo.