Quien a la vida no adora
Y su tiempo desperdicia
En lo más duro se envicia
Y muy poco se valora.
El dinero es que atesora
Y su entraña se envilece
más de que el día amanece
aparenta en absoluto,
Y  no justifica el luto
SI LA PERSONA FENECE.

II

Quien denota comprensión
Y a la vez entendimiento
Es indicado elemento
para la transformación.
Más que tenga creación
Y un afecto singular
Pues no todo da lugar
Amor, dinero y salud,
Y por tener tal virtud
¡SE FESTEJA SIN CESAR!

V

El que vivió en armonía
Compartiendo las bondades
al implantar calidades
es capaz de una ambrosía.
Más el de cruel felonía
Si su pena es singular
Al padecer sin dudar
El entorno lo atormenta,
Y nadie lo tiene en cuenta
FRENTE AL LLANTO FAMILIAR.

III

Hay quien lágrimas copiosas
Derrama ante la tragedia
Pero al que nada le asedia
Son acciones engorrosas.
Mas prefiere las fastuosas
Pues donde hay desprendimiento
Es en íntimo aposento
Pero con los descendientes,
si le atañe a los parientes
UN HONDO RECOGIMIENTO.

VI

Existe en la sociedad
Quien no tiene sentimiento
Y más busca enfrentamiento
Honrando a su mezquindad.
Por la vil mediocridad
Pero que la fin se engrandece
Al que prospera ensombrece
que la punta no lo suelta,
Y a su afán da rienda suelta
EL QUE DE NADA PADECE.

Más el que en todo es humano
De verdad se compadece
Valorando al que  fenece
Y se junta al soberano.
El de espíritu galano
Que del ámbito se inspira
Al mundo, de frente mira
Y comparte su talento,
Pues mientras hay  sufrimiento
¡EL MUNDO INCANSABLE GIRA!