Al decirte que te quiero
hasta sin duda un ¡té adoro!
es no más de un ser sincero
porque tú eres mi tesoro.
Entre albor espiritual
el infinito placer
no hay distancia por doquier
frente a un lazo no cabal.
Si hay esencia personal
y la conciencia es primero
da su rumbo verdadero
la afinidad que luz deja,
pues no te nombro pareja
al decirte que te quiero.
II
Sé que existe una equidad
tras los mismos pareceres
más por eso no sugieres
una sólida unidad.
Me embelesa tu bondad
y tu trato con decoro
más la alegría que afloro
es porque eres fascinante,
que te expreso suplicante
hasta sin duda un ¡Te adoro!
III
Me embriaga tu juventud
tu forma de ver la vida
como una estrella encendida
haces gala de virtud.
Ante sutil inquietud
encuentras el derrotero
y me brindas placentero
unos momentos de gloria,
más si denoto mi euforia
es no más de un ser sincero.
IV
Eres máximo ideal
y seguir cerca de ti
ya no depende de mí
si no tu fe sin igual.
Por mujer de estima real
que brillas igual que el oro
tengas fiel dicha hasta imploro
sin tropiezos en tu agenda,
pues soy el guía en tu senda
porque tú eres mi tesoro.
V
De lo que ocurra algún día
más es de la providencia
sabes el fin de mi esencia
al entender tu valía.
Forjar sola algarabía
es voz de tu sentimiento
y si hay fiel encantamiento
se propende a la verdad,
si siendo solo amistad
parece enamoramiento.
VI
Cimentar la relación
en honor a tu cariz
me tornaría feliz
compartiendo una pasión.
Más lograr tal situación
de una estancia esplendorosa
es haz de tu majestuosa
decisión que nadie obliga,
que admite cuidar la amiga
como si fuera la esposa.
2016-06-09