Por lo que ha sufrido el mundo
al dar pena recordarlo
agobia un dolor profundo
que nadie pueda evitarlo.
Es un testigo la historia
del padecer del planeta
truncándose toda meta
en aras de la victoria.
La guerra por vanagloria
o invasión del infecundo
el odio del iracundo
lo irradia el omnipotente,
que analizar es urgente
por lo que ha sufrido el mundo.
II
Quién no sabe que hay racismo
injusta segregación
y una cruel marginación
del cultor del salvajismo.
Hay el narcoterrorismo
imposible de ocultarlo
ni como disimularlo
al indigno irracional,
si hay un llanto universal
que da pena recordarlo.
III
Entre mismas religiones
se intentan sacar los ojos
y quieren tener de hinojos
a las creyentes naciones.
Si hay líderes con visiones
lo eliminan al segundo
y reina el meditabundo
con ejército de inertes,
al evocar tantas muertes
agobia un dolor profundo.
IV
Abunda la explotación
en pleno siglo veintiuno
el infame inoportuno
cimentando la traición.
Al mandatario en acción
hoy tratan de asesinarlo
y para siempre callarlo
pero a diario se persigna,
la verdad muy duro indigna
que nadie pueda evitarlo.
V
Envenena el medio ambiente
por la industrialización
el que pone la inversión
no hace nada por la gente.
Bello espacio es inclemente
dañado con insistencia
y el país de real potencia
ante el reclamo es violento,
que si ocurre el mismo evento
se nota la indiferencia.
VI
Se utiliza la invención
para un mejor armamento
y se desvía el talento
en aras de destrucción.
Al no haber la creación
evitándose el desliz
hay que buscar la matriz
generando la amistad,
que tan sólo la unidad
depara un orbe feliz.
2016-03-05