Para mi cariño darte
te busco en mi soledad
si un día no pude amarte
dame la oportunidad.
Por tus dones de mujer
en tu esencia descubrí
me enamoré yo de ti
como nunca lo hice ayer.
Sentí en mi alma tal placer
que me impuse conquistarte
más sin poder alcanzarte
no tuve la fe perdida,
insistiendo sin medida
para mi cariño darte.
II
Al ser fuente de ternura
y de grácil sutileza
realzaba tu realeza
insuperable dulzura.
Brillaba la esencia pura
con genuina identidad
honrando a tu cualidad
me embargaban tus matices,
que para ser muy felices
te busco en mi soledad.
III
La dimensión de mi afecto
te lo dije tantas veces
más soportando con creces
mi propuesta no dio efecto.
Si lo mío era perfecto
y es que tú eres obra de arte
pero poco fuiste parte
de mi total ambrosía,
la culpa no ha sido mía
si un día no pude amarte.
IV
Yo te amaba con locura
y también algo sentías
pero nunca hallé las vías
de ser mía tu hermosura.
Más el culto, preciosura
vio el ocaso en tu frialdad
sin que sepa tu heredad
del amor a tu vergel,
ser como brasa en tu piel
dame la oportunidad.
V
Mil románticas escenas
imaginé en mi orfandad
pero nunca de verdad
se realizaron amenas.
De todo nacen mis penas
porque tú eres adorable
y por fiel, inigualable
sufrí horrores al perderte,
que el deseo de quererte
es un fuego inapagable.
VI
Quise amar en libertades
sobre crítica inconsciente
y tras plácida vertiente
compartir grandiosidades.
No hubo firmes claridades
más por mi anhelo fecundo
si vienes, mi amor profundo
lo tendrás con calidad,
sin fingir una amistad
ante los ojos del mundo.
2015-08-10