Lo que nos da tanto goce
es la dicha del momento
cuando acaba el alborozo
termina el encantamiento.

Se añora la exquisitez
y al ser corta la existencia
sin no hay sólida conciencia
es fugaz la calidez.
Muy efímera a la vez
que el tiempo bien lo deshace
 pues lo que un día nos place
se diluye en la vertiente,
más no dura eternamente
lo que al cuerpo más complace.

II

Insatisfecho es el hombre
y del éxtasis requiere
más por tal dicha hasta muere
si hay alguno que lo ensombre.
No creo que alguno asombre
ante pasión del evento
y al lograrlo sin cimiento
la gloria al fin se marchita,
pues lo que más nos excita
solo es dicha del momento

III

Existe apasionamiento
por lograr el objetivo
sea malo o positivo
del ególatra es aliento.
Se orgullece el elemento
si es que repite lo que hace
y si es falso tal enlace
se jacta de su ambrosía,
más queda el alma vacía
hecho lo que satisface.

IV

Por débil el ser humano
busca inmediato alborozo
da rienda suelta a su gozo
sin medida en todo plano.
Lo prohibido se echa mano
en pos del esparcimiento
y recién está contento
por el deleite emotivo,
más si no hay lazo afectivo
termina el encantamiento.

V

Incluso a cualquier edad
en las parejas ocurre
y todo el tiempo discurre
entre sexo en cantidad.
En la entrega en realidad
si hay malicia y complacencia
el desenlace sentencia
ante mentira en el ser,
pues no es lo mismo placer
con amor a la existencia.

VI

Lo que hace por liviandad
o la confianza en exceso
si no pesa el embeleso
es tan sólo una maldad.
Ante la oscura verdad
que la cordura haga nido
y del todo desprendido
la inconducta al fin se aplace,
 disfrutando de que nace
hasta el último latido.

2015-06-04