Del saber más natural
Hago acopio sin descanso
Y además de mi remanso
Es mi acervo sin igual.
En mi espacio terrenal
No hay  un ámbito escabroso
Mi horizonte es majestuoso
Que a más de uno le sorprende,
Y mi palabra trasciende
COMO UN RÍO CAUDALOSO.

                         II

No obedece a fanatismos
Lo que trasmite mi canto
Es lenguaje sacrosanto
Ajeno a partidarismos.
No sabe de oportunismos
Pues lo que viene presiento
Y de nada me atormento
Al verter mi entera calma,
Y por ser la voz de mi alma
SE TORNA EN SUTIL ALIENTO.

                            IV

No soy máxima sapiencia
Me baso en mi buen sentido
Y por no ser coludido
Cristalina es mi presencia.
Con una pública esencia
Discurre mi sentimiento
Más por fértil mi talento
Difunde un libre  bagaje,
Y se convierte en mensaje
¡AL FLUIR MI PENSAMIENTO!

No me tienta la ambición
Ni el fulgor de la avaricia
Más lo que si me desquicia
Es la hiel de la traición.
También la suplantación
Del saber tan generoso
Que abunda el facineroso
Al que denuncio su falta,
Más mi fe va que resalta
¡DANDO RUMBO ESPLENDOROSO!