Cuando te noto indispuesta
dejas de ser adorable
creerlo mucho me cuesta
de ser quizás el culpable.
Al encontrarte sonriente
derrochas tu simpatía
más de pronto sin valía
tu faz se torna silente.
Se hace pesado el ambiente
y el final de tu respuesta
en el viento se recuesta
sin lograr convencimiento,
no sé qué hacer al momento
cuando te noto indispuesta.
II
Me contagia tu actitud
la duda hasta me consume
lo que tu espíritu asume
acrecienta mi inquietud.
De pronto sin más virtud
tu carácter no es amable
y te vuelves indomable
con malestares profundos,
es por eso que en segundos
dejas de ser adorable.
III
Me dices que de tus males
no soy quien las origina
más la duda me domina
sin saber las causas reales.
En tus deslindes casuales
se nota que estás molesta
al no saber tu protesta
a mis dolores se empalma,
qué yo destruyo tu calma
creerlo mucho me cuesta.
IV
Si hay congoja en tu semblante
tu rostro se desencaja
la unidad se resquebraja
sin afecto cautivante.
En el ámbito intrigante
no eres tan acariciable
ni permites que yo te hable
y hasta niegas lo que anhelo,
mi alma sufre desconsuelo
de ser quizás el culpable.
V
Debe haber una verdad
que sola tú la conoces
mientras tanto sin más goces
no comprendo en realidad.
Tan sólo pura ansiedad
alberga tu corazón
pero hay esa sensación
y me tiene preocupado,
si algo más no es de tu agrado
mi amor demos solución.