Mi existencia es flor marchita
sin tu brisa matinal
mi ser sin alma se agita
a la espera del final.
Después de tiempo encontrarte
y escuchar tu dulce voz
me embarga un sufrir atroz
porque no puedo olvidarte.
Si supieras que el hallarte
fue cual idea fortuita
en mis entrañas concita
una fuerte llamarada,
por tu ausencia inesperada
mi existencia es flor marchita.
II
Es el más duro tormento
de mi tan cerca el hallarte
y tan solo conversarte
sin darte un beso al momento.
Bebo la miel de tu aliento
veo tu rostro angelical
y de tu piel sin igual
que de pronto se estremece,
mi horizonte se oscurece
sin tu brisa matinal
III
Desde lejos contemplarte
es hoy más que una tortura
al divisar tu hermosura
cuando anhelo acariciarte.
Junto a mi pecho estrecharte
con devoción infinita
pues mi ser te necesita
por tus rayos de optimismo,
casi al borde del abismo
mi ser sin alma se agita
IV
No entiendo tu faz vacía
sí me contento con poco
por eso a diario te evoco
cuando todo era armonía.
Rememoro la hora y día
que te dije muy formal
de mi amor espiritual
porque motivas mi esencia,
hoy camino por tu ausencia
a la espera del final.
V
De la visión tan fugaz
solo me queda el recuerdo
que hasta mis labios los muerdo
con una rabia mordaz.
Ya no me siento capaz
de hacer mi verso profundo
en la soledad me hundo
y apenas cargo mi cruz,
al caminar sin tu luz
voy sin vida por el mundo.
