El hombre por su embeleso
Es la suma emociones
De muy  tiernas sensaciones
O del más triste suceso.
No falta un rato de exceso
O de real sabiduría
Y acrecientan su valía
En el cielo de la mente,
Y cuando vuelve al presente
RECORDAR NO ES FANTASÍA.

                          II

Aquel pasaje ocurrido
Se vuelve reminiscencia
Y por su fiel trascendencia
Le brinda al ser más sentido.
En el alma forma nido
y acrecienta su valía
tiene leal algarabía
que digno rememorarse,
y es que el hecho de acordarse
ES IMAGEN DE ALEGRÍA

                        IV

Sea malo o sea bueno
Cada cual tiene su historia
En algunos huele a gloria
En otros a desenfreno.
De todo el mundo está lleno
Donde hay iluminado
O el que a nadie le ha ganado
Tan sólo llevan presente,
Que la memoria es la fuente
DE UN AYER NUNCA OLVIDADO.

Cuando a esos tiempos distantes
Se retrocede un segundo
Quien no está meditabundo
De evocaciones fragantes.
Surgen escenas radiantes
De un instante sepultado
Pero al ser resucitado
Revive el latido añejo,
Y es que la vida es  reflejo
¡DE UN INDÓMITO PASADO!