Quien goza de nombramiento
Merecido o por casual
Se cree todo un talento
¡AL SER DUEÑO DE SU UMBRAL!
El de menos calidad
Se da un aire inconcebible
Se cataloga invisible
Al de menos cualidad.
Más sin noble propiedad
Y limitado talento
Se pinta todo un portento
Si le sobra incompetencia,
Y se proclama excelencia
QUIEN GOZA DE NOMBRAMENTO.
II
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Hay quien mira sobre el hombro
Por su ego sin sentido
Pues si no hubiera ascendido
Sólo fuera un vil escombro.
Se le observa con asombro
Su carácter gerencial
Que si no fuera el sitial
No daría ni la hora
pues muy alto se valora
¡AL SER DUEÑO DE SU UMBRAL!
V
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Por tener seguro ingreso
Logra sus comodidades
y no acopia más bondades
Para absoluto progreso.
Lo suntuoso es su embeleso
Por su afecto material
Y sin vasto potencial
No más suscita el encono,
Y disfruta de su trono
MERECIDO O POR CASUAL.
III
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En su centro de labores
Su soberbia es conocida
Y su flojera aprendida
Origina resquemores.
Más hay quien le arroja flores
Por conveniencia y presión
pero al ir sin proyección
Va que aplica golpe bajo,
Y no observa a los de abajo
POR SU OSCURA POSICION.
VI
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Entre los de su calaña
Se forja la cofradía
Y al no gozar de valía
Al entorno va que daña.
Se defiende hasta con saña
Si alguien duda de su acento
Y sin más conocimiento
En la cima se mantiene,
Y por el puesto que tiene
SE CREE TODO UN TALENTO.
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Como en nada se supera
Ni de armonía es la fuente
Por su paso deficiente
Va perdiendo la carrera.
Si con orgullo lidera
Y de lo oscuro se ufana
Se opaca su fe galana
Aún sin haber partido,
Y al final pasa al olvido
¡SIN HITOS PARA EL MAÑANA!
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2013-03-19
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