Hay quien tiene en abundancia
Pero está que necesita
Y ni siquiera medita
En su opulenta ganancia.
No aspira de su fragancia
Como sería lo justo
Con espíritu vetusto
Le gusta pero lo ajeno,
Por eso digo al sin freno
DE QUÉ VALE SER INJUSTO.

                     II

Se le busca algún delito
Al que rápido progresa
Y de su lucha no cesa
Con un afán inaudito.
En todo avance fortuito
Es negado de su gusto
Más porque no halle disgusto
Mejor en nada fijarse,
Y para nunca embarrarse
HAY QUE SER COMO EL ARBUSTO.

                              IV

Quien viene con novedades
Hay mismo despierta envidia
Y la evidente desidia
Irradia sus  propiedades.
Quien prospera en cantidades
Hasta ruin se considera
Y una falla se le espera
Y acusarlo sin descaro,
Que no comprendo al avaro
SI LA VIDA ES PASAJERA.

El que tiene ley la aplica
Y al  más pobre lo censura
Y no existe la cordura
Para el que todo critica.
Como a todo despotrica
Y  por nada se supera
Debe cambiar de manera
Que su forma desencanta,
E inclusive ser la planta
¡QUE DA SOMBRA A QUIEN LO QUIERA!