El hombre por ser humano
De compañía requiere
Y es que lo vano interfiere
Si su norte es soberano.
Por un sendero galano
Adquiere sabiduría
Y desarrolla valía
Delegando su virtud,
Es que si hay ingratitud
NO BRINDA FERAZ VALÍA.

II

Ni los más fraterna altura
Que del dinero depende
Beneplácitos propende
Por no ser de esencia pura.
La que si da es la mesura
Del que luce lealtad
Y si es hito de verdad
Señala rumbo a la gloria,
Forjándose la victoria
¡DEL  AMOR Y LA AMISTAD!

V

Si más prima el fanatismo
Hacia falsos adalides
Llevan éstas vanas lides
A un falaz partidarismo.
Más genera antagonismo
Y una cruel desigualdad
Y por la mediocridad
Se constituye un mal paso,
Y conlleva al cruel fracaso
EL PODER SIN EQUIDAD.

III

De los aires de eminencia
Si acaso no dan sus frutos
Por vacíos absolutos
No denotan contundencia.
A quien le aflora eficiencia
No da cabida al defecto
Apunta por lo correcto
Y hacia el triunfo da la vía,
Y si forma cofradía
ES CONTRARIO DEL AFECTO.

VI

Ni las más grandes riquezas
Completa dicha atesoran
Tan sólo un tiempo mejoran
Económicas grandezas.
Más no dan las sutilezas
De una  dulce compañía
Ni la imponente valía
De una enjundia de bondad,
Pues no más es la unidad
LO QUE GENERA AMBROSÍA.

Por un común objetivo
Y comunión de ideales
Hay que marchar muy formales
Bajo entorno positivo.
Con un afán creativo
Y un apoyo general
Por un orbe celestial
Hacer voto por doquier,
Y se prenda en cada ser
¡UNA LUZ ESPIRITUAL!