Al ocultarme el umbral
El que por nada produce
Su negativa me induce
A pensar que me hace el mal.
Más no resulta casual
Cuando abunda el desatino
Y ante el dolo del cretino
No se opaca la ambrosía,
Y forjaré mi alegría
SI ES QUE NO HAY EN MI DESTINO.

II

Por eso estimo al ufano
Y no respondo al insulto
Y no es que yo este de bulto
Si no que es un lío vano.
Prefiero el albor temprano
De la fiel bendita faz
Y me alumbra todo el haz
De la santa providencia,
Que erigiré en mi conciencia
¡UN MONUMENTO A LA PAZ!

V

De todo lo que he vivido
Y lo que venga después
Si existiera algún revés
Le daré un mejor sentido.
No hay un minuto perdido
Para el humano capaz
Bajo una aurora feraz
Lo recupera el sincero,
Y genera en el sendero
UN HORIZONTE SOLAZ.

III

Por algo tengo confianza
En lo que el tiempo depare
Me da espacio a que separe
El dolor de la bonanza.
Al renacer la esperanza
Me afirmo en el partidor
Y con noble pundonor
Mi ascenso nace fortuito,
Y si el fin estaba escrito
MI SUEÑO SE TORNA EN FLOR.

VI

No hay en mi remordimiento
Ni duda por el futuro
Y así venga el día duro
Ilumino el firmamento.
Lo que es malo lo presiento
Y mi triunfo lo encamino
Y meditando con tino
Mi propuesta toma altura,
Y un espacio de ventura
CONSTRUIRÉ EN MI CAMINO.

No hago caso al insolente
Que representa al fracaso
No más apuro mi paso
Y fortifico mi mente.
Me alejo del decadente
Que despliega resquemor
Y mi afán multicolor
Deja un  rayo de eficiencia,
Y mi fugaz permanencia
¡DEL CIELO TIENE EL COLOR!