Por la ausencia de valores
No hay respeto por la vida
Que hoy mi fe se  consolida
En tus míticos albores.
Dame un norte de candores
Donde no haya sufrimiento
Y alimenta mi talento
Con tu aurora sideral,
Y con tu amor celestial
HAZME INVISIBLE AL TORMENTO.

II

Todo lo malo despeja
De  mi sendero a la gloria
Y pueda escribir mi historia
Con tu santa moraleja.
Mi ruta misma empareja
Con tu sólido aliciente
Y un  infinito torrente
Aflore en mi identidad,
Y dame creatividad
¡OH MI DIOS OMNIPOTENTE!

V

Elígeme el buen camino
Pero desierto de abrojos
Y que sólo claros ojos
Le den brillo a mi destino.
Hazlo más dulce mi trino
Y productiva mi mente
Y santigua mi vertiente
Para asumir todo reto,
Y nunca este sujeto
A LA HIEL DEL PREPOTENTE.

III

Con tu mano generosa
Dime dónde está el edén
Para cantar todo el  bien
De tu mansión generosa.
Con tu luz maravillosa
pacífica mi presencia
Y santifica mi esencia
En aras de promisión,
Y es que con tu bendición
ES MÁS FÁCIL MI EXISTENCIA.

VI

Has de la ecuanimidad
Que resida en mis acciones
Y con nítidas misiones
Desarrolle mi bondad.
Lléname de tu equidad
Bajo un puro sentimiento
Y sea mi pensamiento
Trasmitido en oración,
Y apoya mi inspiración
CON UN HALO DE TU ALIENTO.

Si equivocado transito
Por el mal que a veces guardo
Que no me agobie el cruel dardo
Del inhumano fortuito.
Desecha al ser inaudito
Que irrumpe mi noche quieta
y si es mi rima obsoleta
te pido su rumbo eleves,
Y a tu reino no me lleves
¡HASTA QUE CUMPLA MI META!