Al ser del alma un aliento
por su aureola divinal
el amor es sentimiento
de una esencia espiritual.

Es igual que una alborada
prendida en el corazón
y da fuerza a la razón
como leal enamorada.
Bella es luna encantada
en el camino del viento
que santigua al sentimiento
con su  grácil sinfonía,
siendo un halo de armonía
al ser del alma un aliento.
II
Es un cálido verano
haciendo nido en  la mente
y recibir su torrente
muy tomados de la mano.
Igual a bisa del llano
sin la tiniebla invernal
o algún trino celestial
dando el rumbo más perfecto,
pues se distingue el afecto
por su aureola divinal.
III
Es nacer en primavera
con la herencia de inmortal
y recibir sin final
su caricia mañanera.
La mirada muy sincera
que le da espacio al talento
a la dicha da cimiento
y no hay nada que lo en sombre,
al darle un mañana  al hombre
el amor es sentimiento.

IV
Es una lumbre del cielo
que bendice al fiel latido
como el abrazo extendido
en pos del más buen consuelo.
Le da forma a todo anhelo
tras dimensión sideral
y su aurora  celestial
a la unión va que ovaciona,
volviéndose la persona
de una esencia espiritual.
V
Le da horizonte a los sueños
cristalizando una hazaña
y un jardín nace en la entraña
bajo nortes halagüeños.
Se bendice a los empeños
hay cordura por doquier
en paisajes de placer
es total la melodía,
dando sagrada valía
a todo el humano ser
VI
Quien en su mundo interior
generoso lo cobija
su ruta será prolija
impregnada de candor.
Tendrá el perfume de flor
por toda la eternidad
y al tener felicidad
será el tiempo solidario,
al ser grácil corolario
que mueve a la humanidad.

2012-08-18