Lo nuestro empezó un instante
Como un idilio de historia
De pronto me vi en la gloria
De tu cuerpo fascinante.
Con un beso deslumbrante
El vacío de mi fuente
Se llenó con tu torrente
Y empecé por ruta nueva.
Y de mi cariño es prueba
AL LLEVARTE EN MI PRESENTE.

II

Tus encantos de mujer
Me nublaron la cordura
Y no se ni que locura
Te pedía por doquier.
Ese  cálido placer
Por tu grácil ambrosía
Me cautivo su valía
Que pegado a ti prosigo,
Y es que al conversar contigo
¡SE QUE TE AMO REINA MÍA!

V

Al tocar tu tierna piel
Sentí un estremecimiento
Y selló el advenimiento
De tu fragante vergel.
Tus labios sabor a miel
Me llenaron de alegría
Y por tanta  algarabía
Parecía estar soñando,
Pero yo te sigo amando
DESDE AQUEL LEJANO DÍA.

III

Yo te  evoco en el momento
Y estás viva en mi memoria
Como el agua de mi noria
Que del alma es un aliento.
El estar sólo es tormento
Y mi pena se agiganta
Y mi ensueño se quebranta
Por ausente de mi ser,
que al hallarte como ayer
SENTÍ UN NUDO EN LA GARGANTA.

VI

Fue una grata sensación
Tenerte al fin en mis brazos
Y se originaban lazos
De lo que no era ilusión.
Nos envolvió la pasión
Y una hoguera por mi mente
Y al despertar mi vertiente
olvidarlo nunca puedo,
que  al pasado retrocedo
SI TE MIRO FRENTE A  FRENTE.

Recuperarlo debemos
Todo el tiempo trascurrido
Y formar un  sólo nido
Como los dos lo sabemos.
Es urgente nos amemos
Con afecto muy verás
Que si tu dicha  me das
Habrá mutua calidez,
Pues  he entendido otra vez
¡QUE AÚN TE QUIERO MUCHO MÁS!