ASI ES LA NATURALEZA

Ante azote repentino
de la natura insensible
puede solo un ser divino
brindar la calma posible.

Frente al duro vendaval
o el daño de gris torrente
el humano es impotente
ante su ataque infernal.
Abre una herida mortal
opacando hasta el destino
se mira oscuro el camino
cuando intenta rebelarse,
que más queda lamentarse
ante azote repentino.
II
Cerca al acoso incesante
del gran mar embravecido
queda el hombre compungido
y con un triste semblante.
Cuando el fuego va adelante
o el movimiento invisible
lo que parece imposible
ocurre y la muerte gana,
ante la  furia  malsana
de la natura insensible.
III
Quien tiene  aire angelical
al ser un iluminado
por su albor de consagrado
da sosiego celestial.
Con su aureola sideral
forja consuelo genuino
y emana luz de su trino
tras bondadosa armonía,
es que dar tal melodía
puede sólo un ser divino.
                     IV
El que luce omnipotente
ante la injusta desgracia
si hace efecto de su audacia
da horizonte incompetente.
Más si el fuego es de aura fuente
ante el suceso increíble
nace la  fe  inconfundible
junto al milagro fortuito,
al ser el poder bendito
brinda la calma posible.
V
Por ser muy desolador
un ambiente destruido
hay que marchar precavido
para anular el dolor.
Si se motiva el amor
en el alma existe paz
habrá un  ámbito solaz
con libertad de conciencia,
si se hace  caso a la ciencia
y al de espíritu feraz.

2007-08-15

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