En mi senda a la victoria
De la que soy el autor
Me delegan sinsabor
Que se reseca mi noria.
Ya no tengo escapatoria
Al haber impedimento
Y al ya no tener cimento
Mi  futuro  hasta se oculta,
Y cual olas me sepulta
COMO EN UN MAR TURBULENTO.

II                          

Esquivo sus maldiciones
Que ni siquiera me empaña
Y como ya ni me daña
No opacan mis creaciones.
Por eso en mis proyecciones
Avanzo con fe imponente
Y mi sentido latente
Agiganta mi cariz,
Y al levantar la cerviz
JAMÁS BAJARÉ LA FRENTE.

V                   

A los cantos de sirena
Ni siquiera los escucho
Tan sólo se que más lucho
Si me agobiase una pena.
El que luce aureola buena
Y se le nota consciente
Me vuelvo su confidente
Y le brindo mi amistad,
Y en pos de  mi libertad
NADO CONTRA LA CORRIENTE.

III

Si ponen traba a mi paso
O abunda las zancadillas
No doblaré las rodillas
Ni sabrán de mi fracaso.
Estudiaré cada caso
Con fundamento genuino
Y venciendo el desatino
Me portaré solidario,
Es que si acepto al contrario
SE ENSOMBRECE MI CAMINO.

VI      

Me desplazo hacia adelante
Y ni miro para atrás
Y por mi esencia verás
Fijo ruta deslumbrante.
Por eso ante el vacilante
Yo de  nada me lamento
Me corro del sufrimiento
Y mi fe se perenniza,
Y mi mente me energiza
SI NADIE ME BRINDA ALIENTO.

Cuantos ya quisieran verme
En la última agonía
Y con el alma vacía
Que no pueda sostenerme.
Más no consiguen perderme
Ni con la mirada inquieta
pues demuestro mi receta
Para ver si le conviene,
Que si nada me detiene
¡POR FIN LOGRARÉ MI META!