Al ser tu fuerza increíble
Para ascender con honor
Eres mujer invencible
¡DE INFINITO RESPLANDOR!
Por tu espíritu divino
Que muy poco se comprende
No falta quien no te entiende
Y actúa con desatino.
Más tu carácter genuino
Por ser de aspecto sensible
Encuentra todo creíble
Ante el indigno y sin ruta,
Y elevas con fe absoluta
AL SER TU FUERZA INCREÍBLE.
II
Valoración a tu esencia
Donde el divino es tu guía
No le otorga real valía
El que padece inconsciencia.
Más ante gris divergencia
Renace en ti el pundonor
Y arrasando el estupor
Aflora tu fiel realeza,
Y hay en tu alma fortaleza
PARA ASCENDER CON HONOR.
III
De tu fuente de armonía
Henchido de sutileza
Hay titánica presteza
Impregnada de ambrosía.
Surge tu aurora bravía
Y a lo aparente imposible
Un sustento inmarcesible
Sepulta hondos pesares,
Y derrotando avatares
ERES MUJER INVENCIBLE.
IV
Por tan noble cualidad
De darle vuelta a la historia
Generas nortes de gloria
Por tan fiel capacidad.
Ante la cruel mezquindad
Del camuflado furor
Destellas sutil candor
al horizonte ya oscuro,
Y se llena tu futuro
DE INFINITOS RESPLANDOR.
V
A tu sangre das sitial
en el atrio de tus sueños
y es que en base a tus empeños
Compartido es el umbral.
Hay un albor celestial
En todas tus aptitudes
Y denotas actitudes
En variadas proyecciones,
Y en distintas situaciones
HACES GALA DE VIRTUDES.
VI
Por tu edénica ternura
Al ir con brazos abiertos
Hay quien brinda desaciertos.
A tu encanto y donosura.
Más tu sapiencia procura
ascender con propiedad
Y la universalidad
Te brinda un albor fecundo,
y es que vas forjando un mundo
¡DE PLENA FELICIDAD!
