Por tu alegría sin par
No hay lugar que no anduviste
Y donde permaneciste
Hay un hito singular.
Es mi meta sin cesar
así no alumbren estrellas
de realidades aquellas
acopiaré lo que intuyo
Y por saber lo que es tuyo
SURCARÉ LAS RUTAS  BELLAS.

II

En una azafata de oro
Iré poniendo las muestras
Y sin miradas siniestras
Ajuntaré  mi  atesoro.
Con infinito decoro
Y conforme sucedieron
Lo que un día conocieron
En su lugar las pondré
Y la imagen llevaré
¡QUE TUS PISADAS TEJIERON!

V

Los objetos materiales
Perderán su brillo real
Más tu albor espiritual
Se perenniza formales
Tan igual tus ideales
Por los nortes que reabrieron
Y los que ayer sucumbieron
Pero nunca olvidaré,
Por eso el rumbo hallaré
QUE TUS PASOS RECORRIERON.

III

Es no más tu pertenencia
Y que te hará compañía
Por eso su real valía
Preservaré a conciencia.
Es de tu máxima esencia
Y sentido visionario
Más forjara un corolario
Simbolizando una vía
Y  así no tenga energía
IRÉ TRAS DE TU ESCENARIO.

VI

No importa sin son lejanos
Los horizontes de tu alma
Y es que solo tendré calma
Cuando visite sus llanos.
Si tus ases tan  galanos
Actúen sin más querellas
Y sin que irrumpan doncellas
Me apuntaré a los primeros,
Y pasearé en tus senderos
PARA RECOGER LAS HUELLAS.

Fue prestada la riqueza
los hijos son de la vida
Tus logros por desprendida
Son parte de tu grandeza.
Irradiaste sutileza
Y tus dones de bondad
Más diste oportunidad
Pero nada te llevaste,
Es que el rastro que dejaste
¡ES NO MÁS TU PROPIEDAD!