Muy delicado resulta
El cuerpo humano por noble
Y no es tan igual que el roble
Que su grandeza la oculta.
A cada ser se le ausculta
De la salud es la clave
Y permite que se acabe
Lo que al ser de pronto agrede,
Que en un instante sucede
PASAR DE LO SANO A GRAVE.

II

Quien mucho se extralimita
En sus deberes y acciones
Pagará sus disfunciones
Por su inconsciencia infinita.
Si la máscara se quita
Se sabrá del infecundo
Que por soberbio e inmundo
Denota su ineficiencia,
Si es mejor una existencia
¡CON UN SENTIDO PROFUNDO!

V

A veces por un descuido
Se contrae enfermedad
Y peligra la heredad
Hasta del ser más querido.
De pronto cae rendido
Sea malo o ser fecundo
Y tras un golpe rotundo
No respeta ni al famoso,
Que estar postrado en un foso
SÓLO ES COSA DE UN  SEGUNDO.

III

Quien abusa de la edad
Y no avanza con  mesura
Se acerca a la  sepultura
Tan sólo por veleidad.
Si no hay ecuanimidad
Y ansía más placidez
Por tan oscura avidez
Llega ser lo que le place,
Y lo que de joven se hace
MÁS SE NOTA EN LA VEJEZ.

VI

Nadie está libre del mal
Como de algún accidente
Es que ocurre de repente
Y hasta resulta fatal.
Es muy propio del mortal
Más aún quien menoscabe
Y con el vicio se trabe
que a su espíritu lo afecta,
Y al ser máquina perfecta
POR ESO EL CUIDADO CABE.

El esclavo del placer
No tiene salubridad
Y padece en cantidad
De afecciones por doquier.
Sí acumula desde ayer
Y la indignidad eleva
Es por eso quien se atreva
No sabrá de un embeleso,
Pues ni por rico, el exceso
¡A LA MUERTE LO CONLLEVA!