Hay quien finge una pobreza
Más que por nada la tiene
Y esa línea la  mantiene
Amparado en su bajeza.
Es oscura su vileza
Que se  vuelve descarado
Y si no es beneficiado
Su conducta es media rara,
Y  va sin sangre en la cara
QUIEN ES UN APROVECHADO.

                       II

Es del todo acomedido
Tan sólo por interés
Y se la pasa en el mes
Con el billete pedido.
Eso si no es  desprendido
Pues carece del metal
Y en el de cuenta especial
el sinvergüenza se escuda,
Cómo será tanta  duda
¡QUE SE MERECE EL PENAL!    

                       V                                          

Así exista algún testigo
es normal que plata pida
y de manera indebida
hasta finge ser amigo.
Ya se ha vuelto un enemigo
Por ser más que un desleal
Y por su rasgo anormal
La amistad va que desecha,
Y el inepto se aprovecha
DEL QUE ES BUENO Y BIEN LEGAL.

                            III

De lo que gana el   rastrero
Se queja que  no le alcanza
Y lo cuenta al de confianza
Y le regale dinero.
Por su carácter  artero
Es por todos señalado
Pero ya está acostumbrado
A ser un  facineroso,
Y  al ser más que  mentiroso
ES UN REO CAMUFLADO.

Su familia no está exento
por igual su condición
Sino con qué explicación
A la casa da el sustento.
Como a lo falso da aliento
Y en la tragedia inventada
Es un robo a mano armada
Que realiza con cinismo,
Porque a diario hace lo mismo
QUE MÁS DE UNO YA SE ENFADA.

                     VI

Si no tiene enfermedad
Y no es discapacitado
Sólo es  conchudo hasta odiado
de inconsciente propiedad.
Por su injusta necedad
Y desvergüenza inclemente
Se le critica vilmente
Pues se cree ser muy  listo,
Y  como nunca es bien visto
¡ES NO MÁS QUE UN DELINCUENTE!