Si se tiene vida  larga
Y se llega a la adultez
Tal añeja calidez
La melancolía embarga.
El hecho mismo se encarga
En el alma hacer un nido
Y permanece dormido
Y en la mente se cobijan,
pues en el alma se fijan
RECUERDOS DE UN TIEMPO IDO.

                           II

Al llegar la madurez
Cada cual tiene su historia
Y el laurel de vieja gloria
Hoy depara sensatez.
Dan notoria solidez
Por lo mucho conocido
Y con aquello aprendido
Se consigue más valía,
Junto a la nostalgia impía
AL SER DE UN AYER VIVIDO.

                  IV

La alegría y la tristeza
De pretéritos albores
Originan mil furores
Que al humano dan grandeza.
Es antigua sutileza
Que alegrando al ser hoy van
Y en la entraña  esperarán
El retorno impostergable,
Por ser época imborrable
QUE GRABADOS QUEDARÁN.

No hay el humano insensible
Que ante hermosa evocación
No conmueva esa emoción
De una etapa inmarcesible.
Permanece perceptible
Más por nada  llegarán
Y al presente no verán
Por su antaño postulado,
Y al ser hitos del pasado
¡TAL VEZ NUNCA VOLVERÁN!