Por darme paz y sosiego
aun no siendo generosa
te adoro por ser preciosa
por lo que a tu alma me entrego.
Si no te hallo desde luego
a mi esencia el dolor mella
y al dejar tu euforia huella
a tu lado viviría,
y al fin te iluminaría
SI TUVIESE ALGUNA ESTRELLA.

II

Vas y vienes de la vida
muy junto al amanecer
y das dicha por doquier
por tu esencia conocida.
En tu ruta desprendida
hay sendero matutino
y al avanzar con buen tino
merece felicitarte,
y estaré para abrazarte
¡BAJO UN ALBOR CRISTALINO!

V

Tu imagen adquiere el tono
de los astros mañaneros
y dan rallos placenteros
donde no cabe el encono.
Con la primera de abono
ya tendrías un destino
y por tu rostro genuino
 tu talento activaré,
y al fin te contentaré
AL ALUMBRAR TU CAMINO.

III

Eres fuego en madrugada
calentando el  horizonte
y permites que remonte
bajo tu senda encantada.
Es que la luna dorada
emite rayo fraterno
y muy cerca del eterno
habrá e ti la placidez,
pues tú me das calidez
HASTA EN MIS NOCHES DE INVIERNO.

VI

Eres tan grande misterio
que desmerece el instante
y surge un eco vibrante
emanando magisterio.
La cosa se toma en serio
sin llegar a la querella
y tu aroma a diario sella
tan mágica algarabía,
y a cada rato del día
TE VERÍA TODA BELLA.

Hace tu sola presencia
que me guie por tus pasos
y así evito mis fracasos
que me origina tu ausencia.
Necesito de tu esencia
para amarte sin final
y en unión sentimental
darte lo que nunca di,
y seguiré junto a ti
¡POR TU LUMBRE CELESTIAL!